Lágrimas del Sol

 

🎬 “The Boys - Temporada 1: Superhéroes, poder simbólico y realidades construidas” Sebastián Flores De Santiago

Un enfoque desde el Constructivismo en Relaciones Internacionales.

📖 Introducción: ¿Por qué analizar The Boys desde las RRII?

Vivimos en una era donde las narrativas lo son todo. En la política internacional, como en la vida cotidiana, el poder ya no se mide solo en ejércitos o economías, sino en quién controla el discurso. The Boys no es solo una serie sobre superhéroes corruptos: es una sátira brillante sobre cómo se construyen las verdades colectivas, y por eso encaja perfectamente con la teoría constructivista en Relaciones Internacionales.

Aquí, analizamos cómo la identidad, el poder, la moral y el "bien común" son fabricados socialmente, cuestionando lo que damos por sentado en nuestra propia realidad política.

🧠 ¿Qué es el Constructivismo en RRII?

El constructivismo sostiene que el sistema internacional no es estático, sino un producto de interacciones sociales, valores compartidos y narrativas dominantes.

🔹 “La anarquía es lo que los Estados hacen de ella.” – Alexander Wendt

Este enfoque rompe con el realismo y el liberalismo, que ven la política internacional como una lucha por poder o cooperación. En cambio, el constructivismo pregunta:

• ¿Quién define al enemigo?

• ¿Qué es el poder?

• ¿Por qué ciertas normas son aceptadas globalmente y otras no?

👉 En resumen: la realidad internacional es una construcción social. Las percepciones son clave.

🦸‍♂️ ¿Qué propone The Boys?

La serie nos muestra un mundo donde los superhéroes son corporaciones humanas, manejadas por una multinacional (Vought) que decide qué valores vender, a quién apoyar y cómo construir la percepción de seguridad y justicia en la sociedad.

Pero… ¿qué sucede cuando la imagen es solo fachada?

🧩 Ejes de análisis constructivista en The Boys

1. 🟢 La construcción de identidades heroicas

Los superhéroes no nacen como símbolos: se construyen como marcas. Homelander no es un héroe por sus acciones, sino por cómo es posicionado discursivamente por Vought. El constructivismo insiste en esto: la identidad se forma en relación con el otro.

🔎 Homelander no es solo un "patriota": es un producto hecho para encarnar al "líder ideal" en la mente colectiva.

Ejemplo real: La figura del "líder del mundo libre" atribuida a EE.UU. es también una construcción sostenida por décadas de narrativa cultural y política.

2. 🟠 El poder discursivo y simbólico

Más que fuerza física, los superhéroes ejercen un poder narrativo. Vought controla los medios, las redes, las estadísticas, los documentales, la prensa. Y ese control de la historia oficial es su mayor arma.

“No importa lo que hiciste, importa lo que la gente cree que hiciste.”

Esto se vincula directamente con el poder blando y la capacidad de influir sin coacción directa. Vought no impone, convence, seduce y oculta.

3. 🟢 Las normas y valores como herramientas de control

El constructivismo sostiene que las normas internacionales no son naturales: se construyen y se legitiman. En The Boys, Vought crea su propio código moral:

• ¿Qué es ser un héroe? Lo que ellos digan.

• ¿Qué es justicia? Lo que sus medios transmitan.

• ¿Qué es terrorismo? Lo que ellos etiqueten como tal.

La narrativa moral es flexible y se adapta a sus intereses. Aquí, la ética no es universal, sino una herramienta política.

4. 🔴 La desconexión entre imagen y realidad

Los “súpers” son admirados, pero su realidad está llena de ego, crueldad y abuso. La distancia entre lo que parecen y lo que son revela lo que el constructivismo explica: la identidad internacional no es una verdad objetiva, sino una interpretación consensuada.

Ejemplo real: Estados que se promueven como defensores de los DD.HH., pero que violan sistemáticamente esos derechos en secreto o mediante terceros.

 

🧠 Opinión Crítica Personal

The Boys no solo es una serie entretenida. Es una crítica mordaz al sistema de creencias compartidas en el que vivimos. En el fondo, nos está diciendo:
"No creas todo lo que ves. Cuestiona quién lo dice y por qué."

Desde el constructivismo, esto es profundamente relevante. Me impactó cómo una serie de ficción logra poner en evidencia el mismo fenómeno que vemos a diario en las RRII: países y empresas construyendo relatos para mantener el orden a su favor.

Homelander, por ejemplo, es la imagen exagerada del imperialismo simbólico: una figura idealizada, amada y temida, sin rendición de cuentas. Su poder no radica solo en lo que puede hacer, sino en lo que representa. Y eso es escalofriantemente real.

Ver esta serie desde la óptica constructivista cambió completamente mi forma de entender no solo el poder internacional, sino mi consumo de medios y discursos políticos. Entendí que el poder más peligroso no siempre es el militar, sino el de quien escribe la narrativa.

✅ Conclusión: The Boys como espejo de la política internacional

La primera temporada de The Boys es un laboratorio narrativo donde el constructivismo cobra vida:

• Las identidades son construidas.

• Las normas son manipuladas.

• La moral es estratégica.

• La verdad es una ilusión cuidadosamente orquestada.

En el contexto de las Relaciones Internacionales, la serie expone lo que sucede cuando dejamos que la imagen reemplace a la realidad. Como en el sistema internacional, lo que importa no es tanto qué es, sino cómo se percibe.

The Boys demuestra que el poder simbólico es tan (o más) efectivo que el poder militar. Y que, al final, la lucha más importante es por el control del relato.

📚 Fuentes:

• Wendt, Alexander. Social Theory of International Politics (1999)

• Serie The Boys (Temporada 1)

• Documentos de cátedra y clase – Teoría del Constructivismo

• Nye, Joseph. Soft Power: The Means to Success in World Politics (2004)